MORELIA, Mich., 2 de agosto de 2020.- En uno de los combates que con mayor fuerza ha marcado al boxeo latino, el espigado noqueador de Detroit, Thomas Hearns, propinó un escalofriante nocaut en el segundo round al, hasta entonces invencible Campeón mexicano, Pipino Cuevas, un 2 de agosto de 1980. De acuerdo al portal, Solo Boxeo, Hearns derribó a Pipino poco antes del tañido de la campana, y aunque se levantó, su entrenador, Don Lupe Sánchez se acercó al árbitro Stanley Christodoulou con el fin de comunicarle su rendición.
Era la defensa número once que el mexicano efectuaba de la corona Welter de la AMB, la cual había arrebatado el 17 de Julio del 76 al boricua Angel Cholo Espada en Mexicali. Las primeras 10 defensas fueron exitosas, tanto que 9 fueron por la vía del nocaut. Sólo el norteamericano Randy Shields pudo terminar de pié los 15 rounds que se peleaban en aquel entonces en los combates titulares. Los que aún no sabían de las cualidades enormes de Thomas Hearns, pensaban que, probablemente, el mexicano resolvería esta pelea por la vía rápida y se enfilaría hacia una pelea millonaria con el recién coronado campeón del CMB, Roberto Mano e Piedra Durán o el propio campeón destronado, Ray Sugar Leonard. Ambos se había enfrentado en Montreal el 20 de junio pasado con triunfo espectacular para el Cholo panameño.
Otro candidato para retar al gran noqueador mexicano era el boricua Wilfredo Benítez quien había resignado el título ante Leonard el 30 de noviembre del 79 en el Caesar´s Palace de Las Vegas. La eterna rivalidad entre México y Puerto Rico y el aliciente de que Pipino destronó al boricua Espadas, además de que lo noqueó dos veces más, encendía las pasiones entre ambos países. Ese 2 de agosto del 80 también hubo un debut y una despedida en la historia del boxeo. Fue en Cincinnatti, Ohio. El joven Aaron Pryor se levantó de la lona sacudido por un derechazo de Kid Pambelé en el primer round, para luego imponer su juventud y destronar al gran campeón colombiano en el cuarto round. Pambelé jamás volvió a ser Campeón, mientras que Pryor inició su Época de Oro en el Boxeo.
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