BOXEO TOTAL: julio 2019

domingo, 21 de julio de 2019

Dillian Whyte supera caída y gana título interino



LONDRES -- Dillian Whyte sobrevivió a una caída en el noveno asalto para derrotar el sábado por decisión unánime al colombiano Oscar Rivas y adjudicarse el título interino de peso pesado del CMB.
Fue la décima victoria sucesiva de Whyte tras su única derrota, frente a Anthony Joshua en 2016. El británico quedó como el retador obligatorio de Deontay Wilder por el cinturón pesado del CMB.
Whyte, de 31 años, dominó los primeros asaltos, pero comprometió lo que parecía una victoria en un dramático noveno asalto, en el que Rivas lo mandó a la lona con un uppercut.
Whyte logró recuperarse y solventó los últimos tres asaltos para asegurar el triunfo en las tarjetas, con anotaciones 115-112, 115-112, y 116-111 a favor del británico.
Fue la primera derrota en la carrera de Rivas, de 32 años.

Pacquiao agiganta su leyenda ante Thurman en pelea emocionante

Brillante, emotiva, digna de ser hoy considerada como la pelea del año y ser inscripta en la mejor historia del boxeo de primer nivel. Esos son apenas unos pocos de los muchos elogios que merece 'el peleón' que nos regalaron Manny Pacquiao y Keith Thurman. Hay que retroceder, muchos años en el tiempo para recordar una batalla donde el PacMan hubiera conseguido, como en la noche de Las Vegas, poner de pie a toda la platea del MGM Grand.
Habría que retroceder muchos años, quizás hasta las inolvidables guerras contra Juan Manuel Márquez, para recordar un rival que lo sacudiera como lo sacudió Thurman.
Estaban en juego los dos cinturones de la AMB, pero eso al final del día fue irrelevante. Así esta pelea hubiera sido una eliminatoria o un combate para decidir quien pagaba la parrillada, la reacción de la platea y los millones asistiendo frente al televisor o el dispositivo digital hubiera sido la misma: emoción y agradecimiento.
Nos dieron una pelea exuberante, repleta de acción y que terminó como terminan las guerras verdaderas, cerrada en las tarjetas y con los dos rivales repartiendo trallazos al tú por tú.
En una decisión dividida, fue victoria para el filipino y si se quiere, fue justa, totalmente justa. Por más que no hubiera existido controversia si se registraba un empate o el vencedor hubiera sido el estadounidense.

¿Por qué ganó Pacquiao? ¿Por qué perdió Thurman?

La estrategia de uno y el desajuste del otro al inicio de la pelea, sin duda, establecieron el guion de la pelea y su resultado. El filipino, al contrario de lo esperado, fue el que salió enchufado, poniendo presión y golpeo alucinante, logrando lo impensado: mandar a la lona a un sorprendido Keith Thurman en el mero primer episodio.
Ese arranque trepidante le impidió a Thurman encontrar el ritmo, se vio confundido, superado por la velocidad del filipino y sin encontrar su distancia. Recién en el tercer episodio, el PacMan bajó el pie del acelerador y Thurman logró emparejar, empezó a encontrar su ritmo. A partir de ese momento se fueron alternando en el control de la pelea.
Thurman superaba a Pacquiao en cantidad de golpes lanzados y de poder, pero el filipino era el más efectivo en el acierto y el más espectacular en sus combinaciones de dos y tres golpes enviados a velocidad de vértigo.
Ese acierto fue lastimando al estadounidense que no conseguía ajustar, que volvió a su confusión en el cuarto y el quinto asalto, hasta que recuperó su protagonismo en el sexto y vivió su mejor momento en la pelea en el séptimo y el octavo episodio. Logró encontrar la sincronización entre movimientos de piernas y acierto en el golpeo, al punto que siempre estuvo arriba en la cantidad de golpes lanzados. Especialmente la derecha volada por afuera y las combinaciones por el centro, hasta un doble jab que fue marcando el rostro del filipino.
Los dos recibieron muchos golpes, los dos acertaron muchos golpes y los dos se mantuvieron activos durante toda la pelea. Cuando la batalla avanzó, Manny sintió la fatiga propia de sus cuarenta años y sus reconocidas deficiencias defensivas terminaron de complicarle la pelea.
En términos boxísticos, fue una pelea de alternativas cambiantes, pareja y de mucha entrega. SI a ello sumamos el ambiente de emoción, resultaba difícil imaginar lo que ocurriría en la mente de los jueces. Y así fue, al final del pleito el resultado en las tarjetas fue fiel reflejo de esa imaginada incertidumbre: Tim Cheatham 112-115 y Dave Moretti 112-115 para Pacquiao, Glenn Feldman 114-113 para Thurman.
¿Fue justo? Si lo fue y no solo por la caída temprana de Thurman. El estadounidense fue el que en más de un momento de la pelea estuvo a punto de claudicar, como en el décimo episodio cuando lo dobló un trallazo impresionante de Manny a la zona media. Pareció que allí terminaba la pelea, pero con gran entereza sobrevivió y se fue encima del filipino.
En lo gestual, siempre pareció mejor posicionado en lo ofensivo Pacquiao, como también se vio mejor en la asimilación y sobre todo en la actitud. Manny nunca dejó de mostrar ganas ofensivas, jamás renunció al ataque y en definitiva sus méritos impresionaron mejor que los de su rival. Por si fuera poco, también lo superó en los números: lanzó 686 contra 571 de su oponente.
Una victoria histórica y que indudablemente deberá hacer reconsiderar al filipino su continuidad en el boxeo, especialmente ante rivales tan duros como el de la noche sabatina. Su lugar en la historia ya lo tiene asegurado, el cariño de los fanáticos es infinito y alcanzaría con recordarlo dando guerra como la del MGM Grand ante un gran rival como Keith Thurman, para encuadrarlo por siempre en la mejor memoria.

jueves, 18 de julio de 2019

Ryota Murata recupera el título de peso medio de la AMB con TKO de Rob Brant en la segunda ronda

El retador Ryota Murata golpea al campeón Rob Brant en la segunda ronda de su pelea por el título de peso medio de la AMB el viernes en el Edion Arena. KYODO
 Ryota Murata recuperó el campeonato mediano de la AMB el viernes con un nocaut técnico de segunda ronda en una revancha con el estadounidense Rob Brant.
La pelea de Murata siguió a otra pelea por el título mundial en Edion Arena, donde Kenshiro Teraji, cuyo nombre en el ring es Ken Shiro, defendió con éxito su título de peso mosca ligera del CMB por sexta vez.
La pelea entre Murata y Brant fue una revancha de su pelea por el título de octubre, cuando Murata perdió la segunda defensa de su título por decisión unánime en Las Vegas.
Brant dominó al comienzo, pero a medida que la ronda terminaba, ambos luchadores aumentaron la intensidad como si ambos quisieran terminarla allí mismo.
Murata, medallista de oro de los Juegos Olímpicos de Londres 2012, tomó el mando de la pelea al comienzo de la segunda ronda. Derribó a Brant, de 28 años, y a mitad de la ronda tenía al estadounidense en las cuerdas y la multitud en pie mientras lo golpeaba con impunidad.
"Entré con la impresión de que sería muy difícil eliminarlo, así que creo que fue algo afortunado", dijo Murata.
Murata, de 33 años, mejoró a 15-2. Brant cayó a 25-2.
Teraji, de 27 años, anotó un nocaut técnico en el cuarto asalto de Jonathan "Lightning" Taconing de Filipinas para permanecer invicto en 16 peleas profesionales. Fue el noveno nocaut de Teraji.
Taconing, que tenía problemas para contrarrestar las salvas de su oponente, estaba sangrando por los cortes en su rostro cuando se tambaleó hasta el lienzo en el cuarto. Recobró los pies, pero el árbitro detuvo el combate ante la sorpresa del peleador. Luego, dijo que expresó su insatisfacción con la decisión del árbitro, diciendo que estaba dispuesto a seguir luchando.
Fue la primera derrota por nocaut de Taconing, de 32 años. Cayó a 28-4-1.