El excampeón mundial Wilfred “el Radar” Benítez está en peligro de encontrar su nombre en la lista de afectados en la eventualidad de que impongan recortes entre aquellos que reciben beneficios del maltrecho sistema de retiro del gobierno de Puerto Rico.
Miles de exempleados públicos se mantiene en vela a ante la posibilidad de que sufran sustanciales reducciones en sus respectivas pensiones.
A pesar de que Benítez no cotizó para recibir una pensión como tal, hace varios años el Departamento de Recreación y Deportes (DRD) le dio paso a una iniciativa para que el múltiple campeón mundial reciba $600 mensuales.
Por otro lado, la Asamblea Legislativa aprobó otros $600 mensuales para complementar con el dinero que recibe del DRD. Esa cifra ha mermado, pero se ha mantenido como un ingreso constante. Además, el municipio de Carolina le dona $700 mensuales para sufragar los costos por medicamentos y cualquier otro gasto médico.
Sin embargo, el pasado julio parte del dinero dejó de llegar. El Departamento de Hacienda había suspendido la transferencia de fondos que se tramitaban a través del DRD. Benítez, en aquel momento, cayó víctima de los recortes en los presupuestos gubernamentales.
Yvonne Benítez, hermana del legendario boxeador, relató que tiene un su poder una carta que le envió el Departamento de Hacienda. La misma indica que Benítez dejaría de recibir la aportación económica. Cuando Yvonne acudió para solicitar una certificación para poder acudir a otras agencias para ayudas, algunos oficiales del departamento hicieron las gestiones pertinentes. Pagaron cinco meses retroactivos y el dinero ha seguido llegando para las necesidades básicas de Benítez, quien sufre de encefalopatía traumática crónica por los golpes que recibió durante su carrera en el boxeo rentado.
A la misma vez, desde la Legislatura le informaron a Yvonne que la cifra había bajado a $583. Actualmente, Benítez recibe $1,183 al mes para lidiar con sus complicados problemas de salud.
“La esposa de Alfredo Escalera me llamó y también la habían dicho que le iban a quitar la pensión. Lo quería por escrito en la eventualidad de que la necesitaba si tenía que ir a otro lugar para solicitar ayuda. Ahí fue cuando se movieron y nos informaron que la pensión la iban a dar. Es una pensión que no se quita porque es vitalicia. La única que ha bajado es la de Legislatura. Antes era de $600, pero ha bajado”, lamentó Yvonne, quien se encuentra en Chicago acompañando a su hermano.
Wilfred se encuentra en la mencionada ciudad recibiendo tratamiento médico gracias a la iniciativa de unos individuos que han colocado a su disposición unos doctores. El expúgil permanecerá en Chicago durante un año con la esperanza de que experimente mejoría en su salud.
Mientras tanto, la asistencia económica llega a cuentagotas, pero Yvonne reconoció que el bienestar de su hermano está bajo amenaza si la Junta de Supervisión Fiscal, eventualmente, impone recortes en las pensiones.
Eso podría significar que cualquier avance en la salud de Benítez en Chicago servirá de poco.
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